El documento que aparece en la foto está datado en 1671, se encuentra en el Archivo de la Chancillería de Granada, y aunque, lamentablemente, está incompleto, nos da algunos datos curiosos sobre los pastos y la vida de los pastores de Valenzuela en ese siglo, en el siglo XVII.
Resulta que el concejo de Almagro había perdido un pleito en la Chancillería de Granada contra el concejo de Valenzuela por el uso de los pastos de las dehesas, que eran comunales, y hace una apelación, para lo cual llama a testigos a declarar. En el documento aparece la declaración de un vecino de Almagro, Juan Sánchez Romero, que había sido Caballero de Sierra (una especie de guarda rural de la época) en las dehesas de la Nava, Nueva y Vieja. Según este testigo, existía una antigua concordia entre ambas villas, por la cual en la Dehesa de la Nava podían pastar los ganados y bestias de labor de ambos pueblos. Sin embargo, el concejo de Valenzuela poco a poco había ido a apropiándose de los pastos de la Dehesa, y se dedicaba a "vender los herbajes" a "ganados lanares serranos", es decir: a vender los pastos a los pastores que venían con sus rebaños de otros lugares (los serranos eran los que conducían los rebaños de ovejas desde la sierra al llano, a través de las cañadas de la Mesta), y aunque al principio estos pastores serranos debían hacer su majada en "el cerro redondo que llaman de la Cornudilla", el concejo de Valenzuela se limitaba a cobrar a los pastores un real por cabeza de ganado y les dejaba hacer majadas y rediles por cualquier parte de la dehesa, con perjuicio para los vecinos, pues los ganados se comían todos los pastos que pillaban.
No sabemos como acabó el juicio, porque el legajo no está completo, es un ejemplo más de los múltiples pleitos que Valenzuela mantuvo con los pueblos vecinos por cuestiones de pastos, y además, vemos como se han conservado nombres antiguos de parajes de nuestro término, como el cerro de la Cornudilla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario