Esta foto fue tomada desde el campanario de la parroquia de San Bartolomé y al fondo se ve la torre de la ermita del Cristo. Apareció en el libro "Los Legados de la Tierra".
Nuestra parroquia carece de torre para el campanario, lo que ha dado lugar tradicionalmente a bromas y chascarrillos, aunque también puede ser visto como una característica propia. Las iglesias no tienen porque tener todas torre. Las campanas de la iglesia se encuentran en una espadaña. Las actuales fueron donadas por el cura del pueblo D. Antonio Carrascosa cuando cantó misa.
Al fondo se ve el transepto de la ermita del Cristo de la Clemencia, también conocido popularmente como "torre del Cristo".
Esta imagen por tanto concentra los dos templos religiosos o iglesias que ha habido en nuestro pueblo durante mucho tiempo. Aunque no siempre ha sido así, en Valenzuela ha habido otras iglesias:
En la Edad Media, a parte de la iglesia parroquial, había 3 ermitas: Santiago de Villamar, que se encontraba en la Dehesa de Valdelope (actual término de Aldea del Rey), Nuestra Señora de la Nava (en el camino de Granátula) y San Agustín (en el camino de la Nava o camino del Río).
Santiago de Villamar se arruinó y desapareció en el siglo XVI, Nuestra Señora de la Nava se abandonó a finales del siglo XVII, y a principios del XVIII se construyó la del Cristo de la Clemencia sobre las ruinas de San Agustín.
Durante prácticamente dos siglos y medio, Valenzuela solo tendrá esas dos iglesias: la Parroquia de San Bartolomé y el Cristo de la Clemencia, hasta que en 1955, en pleno franquismo, la Hermandad de Labradores construya la ermita de San Isidro en el paraje de las Canteras, antigua Dehesa Nueva.
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