Tal día como hoy, un 10 de febrero, pero de 1867, el ayuntamiento de Valenzuela se reúne bajo la presidencia de su alcalde, D. Thomas Almodóvar López de Gonzalo, y decide que:
"Es de imprescindible necesidad limpiar y aclarar la totalidad de la zanja del Pellejero desde el punto en que toca el camino de Almagro por haberlo inundado e incluso entrado el agua en la plaza de la villa".
Las crecidas del arroyo Pellejero y sus inundaciones (sobre todo de la Calle del Charco y la Plaza) han sido siempre una constante en Valenzuela y un problema a atajar.
Para esta obra, en concreto, se nombraron como peritos a D. Manuel Segura y a D. Ulpiano López. El primero fue alcalde en varias ocasiones, pertenecía a una influyente familia de carreteros procedente de Miguelturra pero afincados en nuestro pueblo desde finales del siglo XVIII, y D. Ulpiano López era el alguacil del ayuntamiento.
La obra costó 86 escudos, y lo más importante, dio trabajo durante una temporada a varios jornaleros del pueblo que no tenían otro medio de subsistir cuando no había ninguna faena agraria importante.
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| Foto del Arroyo Pellejero en uno de los últimos años en los que ha corrido el agua. |
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